Nativas de Norte y Centroamérica, crece de forma natural en climas mediterráneos y desérticos de todo el mundo.
Son plantas perennes, de gran resistencia a la sequía y que toleran heladas ligeras, de crecimiento lento a moderado.
No toleran el encharcamiento, el riego debe ser moderado sin excesos.
Produce grandes inflorescencias verticales con flores de color crema.